Campanita y Pedro, tienen grandes sueños sobre sus espaldas, pero a veces le pesan demasiado y tienen miedo porque pueden tener un aterrizaje terrenal.
Conscientes del peligro, mandan la palabra socorro a la tierra y ruegan para que alguien le solucione su problema, con respuestas adultas.
Y se quedan a la espera, cantando con los ojos cerrados.
Luego de muchos, pero muchos minutos, Pedro ve cómo el mensaje se hace cada vez más chiquito en el espacio natural del mundo.
Mientras pasa el tiempo, ven sus sueños en la Biblioteca de Babel y los que aún le quedan en sus galerías infinitas, también sus grandes pesadillas. Pedro le dice a Campanita que no quiere crecer.
Un suspiro los sorprende, desordenados de ideas ven las primeras estrellas. Poco a poco anochece. Él, mira hacia abajo, sigue sosteniendo que no quiere crecer. Campanita sonríe y traviesamente lo toca. Ella, riéndose, le dice que no quiere envejecer. Como pueden pliegan los bostezos de la noche y antes de abrazarse, ven la palabra socorro extraviada en un puntito lejano del espacio. Los dos se duermen.
Después de un rato lago, ya en el comienzo del día, abren los ojos. Todo está igual que el día anterior y la palabra socorro, es sólo una pequeña mancha que todos pisan..
Entonces sienten por centésima vez, sus respiraciones acostumbradas y un reloj de pared que toca campanadas.
Se levantan. Pedro mira a Campanita, le ceba unos mates y dice que entre tantos tropiezos, es mejor no seguir creciendo, y Campanita guiñando un ojo, piensa con las sin cuenta imaginaciones que tendrá a mano para que Pedro crezca de una vez por todas.
bELLÍSIMO RELATO rAQUEL. uN PLACER LEERTE. UN ABRAZO
ResponderEliminarRaquelita: me encantó el relato, las conversaciones de los personajes, la picardía sana de Campanita. Magnífico, un beso,
ResponderEliminarbuen relato, raquel y buen blog , felicitaciones compañera de letras
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQuerida Raquel:
ResponderEliminarMe dio gusto leer este cuento, un giro especial, con recuerdos.
Muy bonita la fotografía, limpia, nítida, alegre.
Felicitaciones por el blog.
Un saludito y buenos deseos
Analía
"....el mensaje se hace cada vez mas chiquito en el espacio natural del mundo" esa es la síntesis y la razón de ser a mi modo de ver de todo el relato. Como si pedir ayuda en este mundo sordo se haya vuelto natural que no se escuche. Como siempre tus relatos disparando maravilla. Me gustó mucho leerte y me encanta el blog. Bs. vi
ResponderEliminarMagnifico relato Raquel querida y para reflexionar mucho.Felicitaciones y tu blog es muy bello.
ResponderEliminarAbrazos y besos
Raquel Luisa Teppich
Raquel excelente tu Blog, y como siempre vayan mis fecicitaciones a tu palabra escrita, tu obra es esencialmente un lujo poder leerla
ResponderEliminarCon afecto
Gladys López Pianesi
Siempre me sorprende tu imaginario...la síntesis y profundidad de las ideas que subyacen, donde el límite entre lo ingenuo y lo agudo se entrecruzan entre finas capas...una delicadeza...
ResponderEliminarAbrazo enorme ...
Patricia Mastroberardino
SE TE VE MUY BELLA EN ESTE FELIZ LUGAR DESEADO Y MERECIDO TE FELICITO RAQUEL
ResponderEliminarRubén Vedovaldi
agradable volver a los años niños, razón por la cual me llevo este microcuento a mi blog
ResponderEliminarhttp://misspubis62.blogspot.com
abrazobeso de luz desde Chile, Rocío